En este proyecto se han estudiado los movimientos del pelotari. Teniendo en cuenta la gravedad o el peso, el tiempo, el espacio y las variables de flujo, se han clasificado ocho esfuerzos principales que producen distintas composiciones de movimiento, a partir de las cuales se ha creado una coreografía. En base al movimiento funcional y objetivo realizado por el pelotari con su técnica, se ha estudiado asimismo el posible efecto de la sensación de movimiento, por ejemplo el efecto de ir ganando o ir perdiendo. Continuando con la búsqueda, se han estudiado también los movimientos involuntarios y el efecto que pueden tener los movimientos y las emociones en la respiración, y a la inversa.
Trayectoria del coreografo/a
Eneko inició su trayectoria en el mundo de la danza en 2002, en las clases de jazz de la escuela Anaiak de Donostia. Poco después se trasladó a la escuela de Iñaki Landa a estudiar danza contemporánea. En 2004 ingresó en la escuela de danza The Place de Londres y en 2007 concluyó los estudios universitarios superiores de danza contemporánea. Durante esos años trabajó con el grupo Skinwords. Nada más graduarse, colaboró con la compañía SAGA en Dinamarca y participó en el Festival Internacional de Coreografía de Burgos. Posteriormente participó en la compañía Dance Theatre of Ireland, en Dublín, en otoño de 2007. Desde entonces ejerce en Bilbao de profesor y crea sus propias coreografías con la compañía de Atxarte López de Munain.
Planteamientos del proceso de creación
Se ha llevado a cabo un estudio en profundidad basado en la técnica de Rudolf Laban para analizar la naturaleza del movimiento del pelotari. Este proceso ha tenido una primera parte teórica y posteriormente se ha trasladado al frontón, para que el dantzari juegue con los movimientos estudiados en la parte teórica y, desarrollando esa materia prima, pueda completar un lenguaje de movimientos más amplio. También se han utilizado grabaciones más antiguas de partidos de pelota, para escoger el movimiento que será objeto de estudio. Así, se han escogido el saque, el golpe personal y una serie de jugadas y se han analizado los esfuerzos necesarios para llevarlos a cabo.
Cuando el pelotari se siente cómodo en el juego del movimiento, pasamos a analizar el espacio, es decir, la forma en la que el movimiento modifica el espacio y el espacio modifica el movimiento. En la segunda parte del trabajo se juega con la relación de tensión existente entre pelotari y espacio. El pelotari con su movimiento pretende explicar el espacio al espectador. En la última fase del estudio, el movimiento se saca del frontón y se ubica en un espacio neutro. Al hacer esto, los límites y los códigos son distintos respecto a las pautas tradicionales. De esta forma, el espacio pierde su supremacía y queda al mismo nivel que el pelotari, creando una nueva relación entre ambos.
