“K-OTICA” Ziomara Hormaetxe
Duración: 20'
Dirección: Ziomara Hormaetxe Fernández
Música original: Aitor Echebarria "El_Txef_A", Hannot Mintegia
Coreografía: Ziomara Hormaetxe Fernández
Intérprete: Ziomara Hormaetxe Fernández
Iluminación: Jabi Candela
Vídeo: Xarlene visuals, Alphax
Vestuario: Miriam Estévez
Agradecimientos: Atxarte López de Munain, Matxalen Bilbao, Ana Guadalupe Fernández, Bilbaoescena
Contacto: ziomarahormaetxe@yahoo.es; 669631744
Trayectoria del coreografo/a
Licenciada en Historia del Arte por la UPV/EHU, Ziomara Hormaetxe Fernández comenzó sus estudios de danza clásica en el estudio de Rosa Hierro a los 8 años, iniciándose más tarde en danza contemporánea con Matxalen Bilbao. En 2002 obtiene una beca para continuar sus estudios de danza clásica y contemporánea en la Universidad Sophia Antipolis de Niza (Francia). Desde 2004 es bailarina de la compañia de poesía, música y danza Galatea, donde comienza a trabajar de manera autodidacta sobre la creación coreográfica. Desde entonces trabaja en la creación de sus propios proyectos artísticos como creadora e intérprete independiente. Cuatro piezas avalan su trayectoria: 2005: ‘Identidades nºX’; 2008: ‘La noche se posó con las alas rotas’; 2010: ‘Gorputzaren Izena’; 2012: ‘Tan-Tak’ . Continúa su formación en Madrid, Londres, Nueva York y actualmente en Barcelona, donde colabora con el colectivo Proyecto Experimental liderado por Mauro Barahona.
Planteamientos del proceso de creación
La teoría del caos es la denominación popular de la rama de las matemáticas y la física que trata ciertos tipos de comportamientos impredecibles de los sistemas dinámicos que pueden clasificarse en estables, inestables y caóticos.
Esta pieza surge de una base que es la soledad, el desarraigo y la incertidumbre creados por lo imprevisible y la ausencia de puntos de referencia, alimentando una lucha entre lo estable y lo inestable favoreciendo al caos.
El método de trabajo de esta obra empieza desde el golpe de una palabra en mis oídos, CAOS. Esa palabra produce en mí, temor, fragilidad y soledad. Me siento sola, desnuda, desarmada. Este concepto me lleva a la individualidad más cruda y a la incertidumbre más sobrecogedora e inequívoca, que hace que recorra ese espacio escueto y a la vez indefinido dejando sin límite mi memoria y mi percepción del espacio. A partir de ese descontrol y la improvisación, empiezo a elegir o eliminar materiales y a fijar los movimientos. Es la experiencia de la aceptación y la no aceptación.
El movimiento está trabajado y parte de factores como el espacio, el tiempo, la velocidad y el peso. A su vez me interesa desarrollar un lenguaje que resalte la “fisicalidad”.
La música, la proyección y el movimiento han sido trabajados conjuntamente para crear una atmósfera apropiada para la pieza.
Sinopsis
El mundo no sigue estrictamente el modelo del reloj, previsible y determinado, sino que tiene aspectos caóticos.
Esta pieza está inspirada en la teoría del caos, desarrollada a partir del principio que defendía que todo está interrelacionado en un sistema de reacciones. Enfoca senderos escondidos, matices, la sensibilidad de las cosas y las reglas que conducen, de lo imprevisible a lo nuevo.
La obra aborda el tema de la tensión entre aleatoriedad y fatalidad; entre la imposibilidad de determinar el futuro y el hecho, de que solo uno de los futuros posibles, tendrá lugar. Considero, que existe un fuerte potencial estético y espiritual en la capacidad/necesidad humana, de aceptar, adaptarse, y lidiar con lo imprevisto y lo determinado, es decir, de convivir cotidianamente con el caos y, eventualmente, con el único evento seguro, que es el fin de la vida.
